En los últimos años el futuro de la Unión Europea se está debatiendo desde el punto de vista político y económico. El brexit, la crisis de los refugiados y la llegada al poder de fuerzas euroescépticas en Centroeuropa ha cuestionado la unión que se inició con los Tratados de Roma en 1957. En este contexto actual, es más importante que nunca valorar la importancia que ha tenido esta unión supranacional desde su fundación. España, aunque no formó parte de los seis países fundadores, firmó el acta de integración en 1986. El año 2019 es un buen momento para reivindicar la importancia de la UE, pues se cumplen cuarenta años de las primeras elecciones democráticas al Parlamento Europeo y del inicio oficial de las negociaciones entre España y la CEE para su adhesión. Cuestiones sociales, agrarias, industriales y fiscales fueron el epicentro de los debates para que la nueva democracia española lograse equipararse a los países comunitarios. Tras el paso de cuatro décadas, es el momento de valorar la importancia que tuvieron aquellos encuentros, cuáles fueron las discusiones más complicadas y, sobre todo, realizar un balance de los cambios producidos entre 1979 y 2019.
La jornada de conmemoración tiene como objetivo generar un foro de debate entre los protagonistas de las negociaciones, tanto españoles como comunitarios, y también entre varios historiadores especialistas en la materia. Este intercambio de opiniones de diferentes actores del pasado con investigadores europeístas posibilitará dos líneas de reflexión. La primera sobre la importancia que tuvo el inicio de las conversaciones hispano-europeas y la segunda acerca de la Europa actual con miras hacia el futuro.
